Enfrentarse a las masculinidades militarizadas: Movilización de los hombres por la paz feminista
En julio de 2020, WILPF y la Alianza MenEngage, una red global que trabaja para involucrar a hombres y niños en los derechos de las mujeres y la justicia de género, lanzaron un programa conjunto llamado Confronting Militarised Masculinities: Movilizando a los hombres por la paz feminista.
Dado que la violencia y la guerra tienen un efecto devastador en países, comunidades y personas de todo el mundo, el programa arroja luz sobre las causas profundas de la violencia y los conflictos armados en todo el mundo y las cuestiona. A través de un conjunto de investigaciones y análisis de vanguardia, el programa avanza en la comprensión global de cómo el «sistema de la guerra» está enredado con prácticas y representaciones de la masculinidad asociadas con el poder, la violencia y el control, y pone de relieve el trabajo vital de los hombres que trabajan en solidaridad con las mujeres activistas y aquellos que están más allá del binario de género para promover la paz feminista.
Centrado en cuatro países -Afganistán, Camerún, Colombia y la República Democrática del Congo-, el programa consta de cuatro elementos clave: la creación de alianzas entre organizaciones de mujeres por la paz y organizaciones que trabajan con hombres por la igualdad de género; un conjunto creciente de investigaciones y análisis sobre las causas, manifestaciones y respuestas a las masculinidades militarizadas; la abogacía nacional, regional y mundial; y un conjunto de herramientas de comunicación -un documental de una hora de duración recientemente encargado, titulado Power On Patrol, y una exposición fotográfica en línea- que exploran las nociones de masculinidades militarizadas y las alternativas a ellas en todo el mundo.
«El concepto de masculinidades militarizadas recoge la «fusión de ciertas prácticas e imágenes de masculinidad con el uso de armas, el ejercicio de la violencia y la actuación de una masculinidad agresiva y frecuentemente misógina».
– KIMBERLEY THEIDON
El equipo de investigación original realizado para el proyecto fue generado por académicos y líderes de pensamiento de los países socios de WILPF -Afganistán, Camerún, la República Democrática del Congo, Colombia, Sri Lanka y Zimbabue- y de otros lugares del mundo. Con casi dos docenas de informes en total, una mezcla de revisiones de la literatura, estudios de casos e investigación cualitativa en profundidad con una serie de grupos en cada país, la investigación explora las causas y los impactos de las masculinidades militarizadas, y de las estrategias que pueden movilizar eficazmente a los hombres para actuar por la paz feminista.
Power On Patrol, el documental de una hora de duración, revela el verdadero coste humano de las masculinidades militarizadas en estas sociedades en conflicto y pone de relieve a los hombres que trabajan con las mujeres activistas para promover la paz feminista a través de impactantes testimonios personales entrelazados con las principales voces expertas en la materia.
La exposición fotográfica online Masculinidades Militarizadas y Alternativas es el resultado del concurso inaugural de WILPF, que invitó a fotógrafos de todo el mundo a presentar fotografías que exploraran la relación entre las masculinidades, el conflicto y la paz, la violencia y el cuidado.
Madeleine Rees, Secretaria General de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad, afirma: «El trabajo que están realizando las secciones de la LIMPAL para movilizar a los hombres por la paz feminista en África, Asia y América Latina es inspirador. La investigación, las imágenes y las películas que ahora se recogen en nuestro sitio web transmiten la creatividad, el coraje y la determinación que ofrecen una esperanza real de un cambio significativo. Merece una amplia audiencia».
Haga clic aquí para ver la historia en el sitio web de WILPF. Se vuelve a publicar aquí con el permiso de WILPF.
Acerca de WILPF
La misión de WILPF es poner fin y prevenir la guerra, garantizar que las mujeres estén representadas en todos los niveles del proceso de construcción de la paz, defender los derechos humanos de las mujeres y promover la justicia social, económica y política.