Líbano: Solidaridad
Seguimos preocupándonos y solidarizándonos con nuestros colegas libaneses que se encuentran en peligro a medida que se intensifican los ataques. Nuestros pensamientos están con ellos y con sus seres queridos.
Seguimos teniendo el corazón roto mientras continuamos siendo testigos de la escalada de violencia en los Territorios Palestinos Ocupados. Nuestros llamamientos a un alto el fuego inmediato y a la desescalada, expresados en nuestras afirmaciones de 10 de noviembre de 2023 y 4 de junio de 2024, siguen siendo tan urgentes como siempre.
Ahora, con la extensión de la violencia al Líbano, la situación es aún más alarmante. Nos solidarizamos con todos los afectados -incluidos nuestros miembros y socios de la región- y renovamos nuestro llamamiento para que se ponga fin al sufrimiento.
Alianza MenEngage, junto con nuestros más de 1.100 miembros de 92 países de todo el mundo, expresamos colectivamente nuestra conmoción y horror ante el ataque indiscriminado contra civiles libaneses por parte de las fuerzas israelíes y sus aliados. Según Al Jazeera, al menos 569 personas, incluidos niños, han muerto y 1.835 han resultado heridas en un solo día, entre el 23 y el 24 de septiembre. Esta violencia y estas matanzas deben terminar y los responsables deben rendir cuentas.
Como comunidad internacional que trabaja por la igualdad de género y la consolidación de la paz, creemos firmemente que la guerra no es inevitable. La guerra no es la solución a la paz que pretendemos alcanzar. Forma parte de una lógica patriarcal que valoriza la agresión, la ocupación y la dominación. Estas normas y enfoques dominantes y militaristas son el reflejo de las problemáticas economías explotadoras de la guerra y de un poderoso complejo militar industrial.
Al producirse estos ataques durante la 79ª Asamblea General de las Naciones Unidas, hacemos un llamamiento a la comunidad internacional, a los responsables políticos y a los líderes mundiales para que adopten medidas urgentes y decisivas en favor de la paz y los derechos humanos, ¡ya!